Las atracciones infantiles son menos intensas, más lentas y proporcionan menos diversión. Por su parte, las montañas rusas y las atracciones de adrenalina ofrecen más emoción, pero también más náusea. La intensidad de una atracción hace que la emoción y la náusea varíen. Los visitantes reaccionan de forma más positiva si suben a una actividad con su intensidad preferida. Asegúrate de complacer a todo el mundo.